El uso de protección respiratoria es una de las estrategias de control de riesgo, asociadas no solo a la protección contra el contagio de la COVID-19, sino contra otros agentes que también pueden generar enfermedades como el material particulado, la sílice y otros gases y vapores molestos.

En nuestras operaciones se utilizan varios tipos de protección personal respiratoria, cada uno con sus fortalezas y limitaciones. Te explicamos brevemente en qué consisten y cómo usarlos para minimizar el riesgo de afectar nuestra salud:

• Mascarilla en tela de varios usos (tapabocas): este elemento tiene en su interior filtros en tela no tejida que ayudan a retener la mayoría de las gotículas con saliva que pueden transmitir la COVID-19, sin embargo, no filtran el aire que respira el usuario contra material particulado ni otros contaminantes. Estas mascarillas se deben utilizar en TODO momento en las áreas comunes como filas de servicio de alimentación, vestidores, buses y, en general, en los sitios donde compartamos con nuestros compañeros. Se deben lavar después de cada jornada hasta el número de veces que se establece en cada una. Su protección contra la COVID-19 consiste en evitar que las gotÍculas salgan al exterior, pero no filtran el aire que se respira, por esto es indispensable que todas las personas estén usándola si comparten en un espacio cerrado o en distancias menores a dos metros entre sí.
• Respiradores N95 sin válvula: Las mascarillas N95, técnicamente consideradas respiradores, son nombradas por su capacidad de filtrar el 95% de las partículas del ambiente usando electricidad estática. Para asegurar su seguridad y eficacia, todas las N95 deben ser probadas y aprobadas por el Instituto Nacional de Seguridad y Salud Ocupacional (NIOSH). Estas se han asignado para personal médico en todos los países. Dentro de la organización se han priorizado para las tareas operativas en contacto con contaminantes potencialmente dañinos para la salud. Se deben cambiar cuando el usuario sienta dificultad para respirar con el EPP o sienta algún aroma molesto. A diferencia de los ambientes médicos, en las operaciones industriales solo se cambia este elemento por saturación o daño.
• Respiradores N95 valvulados: Este tipo de respiradores igualmente tienen la capacidad de filtrar el 95% de las partículas del ambiente usando electricidad estática, además tienen un sistema de válvulas que permiten la salida de aire del interior de la válvula para mayor comodidad del colaborador que la usa. Para asegurar su seguridad y eficacia, todas las N95 deben ser probadas y aprobadas por el Instituto Nacional de Seguridad y Salud Ocupacional (NIOSH). Estos respiradores se han asignado a colaboradores que realizan actividades en espacios especialmente calurosos o húmedos, donde están en contacto con contaminantes que pueden afectar su salud. No se deben usar en espacios o zonas comunes como filas de servicio de alimentación, vestidores, buses y, en general, en los sitios donde compartamos con otros colaboradores. Nos debemos asegurar de que todos los colaboradores en estas áreas usen este mismo elemento de protección personal o respiradores N95 sin válvula, ya que NO SE DEBEN USAR EN ESPACIOS DONDE LOS DEMÁS USEN mascarillas de tela o no tengan protección respiratoria. Se deben cambiar cuando el usuario sienta dificultad para respirar con el EPP, o sienta algún aroma molesto. A diferencia de los ambientes médicos, en las operaciones industriales solo se cambia este elemento por saturación o daño. En el caso de respiradores media cara o cara completa se deben lavar al terminar la jornada de acuerdo a las indicaciones del fabricante.

Recordemos entonces que los Elementos de Protección Personal Respiratoria que se nos suministra la compañía ofrecen protección no solo contra la COVID-19, sino contra otros contaminantes con los que podemos entrar en contacto durante nuestro trabajo, utilicémoslos de acuerdo a sus especificaciones y en los lugares establecidos.

Además, tengamos presente que en Argos hemos establecido un protocolo de bioseguridad que abarca varias capas de protección (en el trabajo y fuera de él) y que debemos cumplir con todas ellas para evitar los contagios entre nosotros como colaboradores y nuestras familias, Por eso ten siempre en mente:

• El uso de mascarilla de forma permanente
• El  lavado de manos cada dos horas y al menos por 40 segundos
• La distancia social de 2m entre personas

#NoBajesLaGuardia frente a la COVID-19, ni frente a ninguno de los riesgos propios de nuestras operaciones.