Si cuidas a una persona con COVID-19 en casa o en entornos que no son de atención médica, sigue estos consejos para protegerte y proteger a los demás:
BRINDA APOYO
Ayúdale a satisfacer sus necesidades básicas
- Ayuda a la persona enferma a seguir las instrucciones de cuidado y medicamentos de su médico. En la mayoría de los casos, los síntomas duran pocos días y las personas se sienten mejor después de una semana.
- Prueba si los medicamentos de venta sin receta médica ayudan a la persona a sentirse mejor.
- Procura que la persona enferma beba mucho líquido y descanse.
- Ayúdala con las compras de comestibles, a surtir sus medicamentos y acceder a otros artículos que puedan necesitar. Evalúa recurrir a un servicio de entrega a domicilio de los artículos siempre que sea posible.
- Cuida a sus mascotas y limita el contacto de la persona enferma con ellas siempre que sea posible.
Permanece atengo a los signos de alarma
- Ten a mano el número de teléfono del médico de la persona que cuidas.
- Usa la herramienta de autoverificación de los CDC, que puede ayudarte a decidir si es necesario pedir atención médica.
- Si el estado de la persona empeora, llama a su médico. Para emergencias médicas, llama al 911 y dile al operador de despacho que la persona tiene o podría tener COVID-19.
PROTÉGETE
- Limita el contacto con la persona con COVID-19
- Come en habitaciones o áreas separadas a dicha persona
- Evita compartir artículos personales
- Usa tu mascarilla siempre que estés en contacto con la persona enferma
- Lávate las manos con frecuencia
- Limpia y desinfecta espacios
- Monitorea tu propia salud
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